Falsa Poesía

Con todas las inspiraciones y las lágrimas,
sólo se es capaz de escribir sentimientos mediocres.
De esos que no tienen sentido,
pero sí bellas metáforas que nadie entiende, porque no dicen nada.

Un vacío de profundidad en las letras,
un eco sin respuesta aparente ni directo.
Una historia incompleta que nunca comenzó,
y una situación que avanza gradualmente.

El rostro que no vuelve a mirar de igual forma.
La escoba puesta en manos de otro,
provoca que la conciencia cambie el rumbo establecido.
Los caminos se vuelven más indepedientes y riesgosos.

La aceptación por parte de los conservadores de lo impuesto,
convoca a que la pasión del triunfo tome colores rojos y fuertes.
Sin seguir una línea, ni postura intelectual,
se puede llegar a luchar por los principios, más que por las convicciones.

Mientras unos convocan a las musas,
otros tan sólo siguen el ritmo de las manos ahogadas.
Observando como se va formando la falsa poesía
y la astucia de sílabas y vocales unidas en un hermoso lazo.

Tan sólo existe un interpretador de las rimas,
un alma gemela y un duplicado de la razón.
Falsa poesía aquella que no tiene sentimientos en el cuerpo,
y que planea no llevarse a la acción valiente.

No se trata de crear revolución con las palabras,
es sólo romper con el sistema de la estabilidad.
Conseguir el quiebre de los silencios muertos
y manifestar las expresiones vigentes del interior.

Enaltecer el desahogo,
abrir los caminos obstaculizados,
lograr hacer del mundo un sueño,
y del sueño, una poesía.

¡Pare taxi!

Y lléveme a un sueño del que no pueda despertar.
Tenga el dinero y alcanzará para viajar más allá de esta esquina.
Necesito que vaya rápido que llega la hora en que ya no habrá tiempo.
Dé una vuelta por acá y piérdase por aquel callejón.
Deténgase en esta esquina que compro la mercancía y me subo de nuevo.
Necesito recorrer por esas ciudades perdidas.
Terminemos en el Triángulo de las Bermudas y convirtámoslo en cuadrado.
¿No le molesta que todo esto sea tan elemental?
Aprovechemos que estamos de paso y cambiemos el mundo en una sonrisa,
En este planeta hay tanta conformidad y tan pocas ganas de reír.
Cuidado con este trayecto, que las emociones son profundas y permanentes.
Ahora vaya por su izquierda y cambie el volante a la derecha,
Estamos en el mundo del revés, en donde la lluvia son las lágrimas de la gente que sufre colgada de las nubes.

Elemental mi querido taxi, soy esa persona que sólo quiere arrancar de la gran ciudad. imaginando que sólo la libertad se encuentra en escaparse de tratar de encontrarla.me he quitado las amarras y mientras la depresión está de moda, yo prefiero ser montaña y no valle.
Vaguemos por este cerro, saltemos a saturno y júpiter y reivindiquemos a plutón como el hermano menor.

¡Pare taxi y diríjase a donde no pueda buscarse! Estoy perdida en una ciudad de semáforos y automóviles ruidosos. No mire hacia atrás y sólo devuélvase cuando sea estrictamente imposible.

Noción de su muerte

Está en sus últimos pasos antes que la muerte venga a recoger su rostro y su alma.
Alcanza a mirar hacia atrás. Desde el pasado la perspectiva es mejor.
Todo lo que vivió se reduce en recuerdos que vuelan dentro de una mente agonizante.
Se da cuenta que está viejo, que se mimetiza con cualquier mueble obsoleto de la casa.

Quisiera volver a los años de antaño, en que era alguien y no algo sobre la cama donde padecía.

La memoria es frágil, tiene destellos rápidos de alegrías y satisfacciones.
Sus hijos, sus nietos ya no estaban ahí, que extraño sentir esta soledad.
La dulce decepción de vivir con nostalgia y como un ente.

Una cruel venganza del eterno e impaciente paso del reloj de arena.
Se siente como sólo un anciano sumergido en las brumas de unas sábanas que el mismo cambiaba.
Todos sus pares ya habían rehecho su vida con nuevos agentes . ¿Cuál quedaba para él?
Gritaba con desesperación que lo despertaran de esa pesadilla.

Cuántas cosas que había dejado de hacer, cuántos viajes, cuántos anhelos.

Todo el futuro se veía tan lejano, que quiso esperar las oportunidades correctas para hacerlos.

El problema es que el tiempo no da respiro y el riesgo es parte de acoger las acciones.

Los hechos que había perdido, ahora quería convertirlos en factibles.

No quería lástima, ni migajas de nadie.

Quería sentirse todavía amado, por algo seguía luchando por seguir con los pies en la tierra.

Parecía en vano que alguien viniera en su rescate, mas el añorar lo mantenía con ojos abiertos.

La luz ya se acercaba hasta el encuentro del cuerpo.

La ausencia y la muerte lo hacían miedoso ante la incertidumbre.
Pero más temor le daba el saber que no pudo despedirse de nadie.

El túnel avanzaba cada vez más.

En ese momento murió con una lágrima atrapada entre sus manos.